Alexandra González Aguña
El cuidado es pensamiento y acción que construye a la persona en un continuo vital. Enfermería toma este cuidado como objeto de estudio, creando modelos conceptuales y aplicados a la práctica clínica. A su vez, los lenguajes formalizados enfermeros ofrecen catálogos de términos que permiten estudiar el conocimiento sobre cuidado, tanto para representarlo como para interpretarlo. Un lenguaje que permite la construcción de sistemas computacionales que simulan a expertos en la toma de decisiones, como es la diagnosis clínica donde se enmarca la Triangulación Taxonómica; una técnica que identifica diagnósticos a partir de la información disponible sobre la valoración de la persona, los resultados en salud planificados y las intervenciones que se realizan. El objetivo general es: Representar la gestión del conocimiento del cuidado de la persona a través de los lenguajes formalizados. La investigación se divide en tres apartados: lenguajes, ámbito profesional y atención en salud. Los lenguajes formalizados enfermeros se analizan desde el Proceso de Atención de Enfermería, el Standard ISO 18104:2014 y el metaparadigma del cuidado. Posteriormente, el estudio desarrolla la técnica de triangulación que implementa en una herramienta computacional y aplica manualmente a seis protocolos asistenciales. Finalmente, la técnica es validada con un proceso de salud global, la pandemia por COVID-19, para identificar diagnósticos en una guía internacional, crear un manual de planes y evaluar la usabilidad de una herramienta de apoyo clínico. Los resultados muestran el lenguaje como nexo entre la práctica, la interoperabilidad computacional y la abstracción a una visión disciplinar. Paralelamente, la Triangulación Taxonómica demuestra gestionar el conocimiento en situaciones diversas: ante lenguaje formalizado, natural o desde la experiencia, ante la atención profesional enfermera (ya sean situaciones vitales o procedimientos técnicos) o, ante cualquier situación de salud. Más aún, la técnica de triangulación logra generar conocimiento, tanto desde la información disponible, así como en situaciones nuevas. La investigación propuesta no halla estudios similares en el ámbito sanitario y computacional, ha sido avalada mediante publicaciones de impacto internacional y puede ser trasladada a otras disciplinas. Además, la técnica y resultados tienen transferencia en la sociedad al formar parte de proyectos del sistema sanitario. En conclusión, la gestión del conocimiento acerca del cuidado de la persona precisa de un modelo basado en la variable de un lenguaje normalizado, la cual surge desde una visión disciplinar acerca del cuidado y la gestión de dicho conocimiento mediante triangulación.
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