Si se indaga entre la ciudadanía se suelen encontrar respuestas del tipo de "¡Las matemáticas sirven para todo!" o"¡Las matemáticas están en todas partes!". Pero en cuanto se pretende concretar, con frecuencia no se avanza más allá de las utilidades comerciales del comprar y vender. Parece evidente que la presencia de las matemáticas en los programas de todos los cursos de la enseñanza obligatoria (algo común a todos los países) es síntoma de que las matemáticas sirven para algo más que para comprar y vender. Pero (supongamos con optimismo que quizás es por la obviedad de su importancia) lo cierto es que el sistema educativo no hace interiorizar en el alumnado los diversos usos cotidianos de las matemáticas (que son algo más que números, además).
Vamos a reflexionar en este artículo de algunas estrategias posibles para poner de manifiesto la presencia de números en la vida diaria, para reflexionar sobre las diferentes funciones que cumplen y la manera de apreciar algunas de las menos evidentes:las relacionadas con la codificación.
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