En este trabajo mostramos cómo la existencia de mínimos de facturación inducen a los agentes a "camuflarse", y, en consecuencia, la observación de consumos no coincide con la de "tipos" de consumidores. Proporcionamos un método que permita estimar la verdadera distribución de "tipos" a partir de los datos inducidos por una tarifa que lleva a que distintos tipos de agentes adopten un comportamiento similar. Ello nos permitirá estimar la cantidad de consumidores que se camuflan en cada tramo y mostrar cómo la introducción de una tarifa en dos partes permite incrementar el bienestar del 65,65% de los consumidores, a pesar de mantener constantes los niveles de ingresos de la empresa y el nivel agregado de consumo actual.
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