Lo primero que quiero hacer es expresar mi agradecimiento a Jose Ameijeiras y Consuelo Parreno por la invitación a escribir este artículo de opinión. Acepté con entusiasmo, aunque al principio sentí algo de vértigo. Me propusieron hablar sobre mi experiencia personal en estos primeros años de carrera y los retos a los que nos enfrentamos los investigadores. Sin embargo, no me consideraba la persona mas indicada para dar consejos, especialmente con solo tres años y medio desde que defendí mi tesis. Pero supongo que, quizás por eso mismo, mi perspectiva podría ser útil para aquellos que están comenzando, ya que la distancia con el inicio de mi carrera es relativamente corta.
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